En este artículo, quiero explicarte unos cuantos ejercicios para reducir la ansiedad. El objetivo ofrecerte unas cuantas técnicas para poder abordar episodios de ansiedad que puedas sufrir y poderlos manejar con éxito.
Si estás leyendo este artículo en búsqueda de ayuda, seguramente ya sabes lo que se experimenta en situaciones de ansiedad, pero ¿sabemos porqué ocurre realmente lo que llamamos «ansiedad»?
¿Qué es la ansiedad?
Popularmente, conocemos la ansiedad por la aparición de emociones que aparecen en situaciones de debilidad, cuando nos sentimos tristes, amenazados, o bien, en peligro. Ante estas situaciones, nuestro cerebro actua para protegerse enviando estímulos. Dichos estímulos que pueden afectar tanto nuestro comportamiento habitual: evitar salir a espacios abiertos, contacto con otras personas, etc; como estímulos físicos: palpitaciones cardíacas, sudor, dolores corporales, problemas de respiración, etc. Incluso entrar en pensamientos o creencias difíciles de controlar.
Las causas que determinan estos episodios de ansiedad son difíciles de establecer. Al estar encuadrado dentro del campo de la salud mental, requiere un conocimiento concreto del caso personal de cada uno de nosotros. Por este motivo, si experimentas momentos de ansiedad de forma repetida, te aconsejo que consultes con un profesional para que valore tu caso.
Ejercicios para reducir la ansiedad
Técnicas de respiración para controlar la ansiedad:
Existen distintas técnicas de respiración. Yo te propongo dos:
Ponte la mano en el corazón, escucha tu latido. Ahora concéntrate en tu respiración. Toma el aire lentamente por la nariz. Haz una respiración profunda. Cuenta mentalmente mientras inspiras. Suelta el aire por la boca mientras nuevamente cuentas mentalmente. Comprueba ahora tu latido. Tu corazón late despacio ahora. La ansiedad ha bajado.
Escoge un lugar tranquilo de tu casa y ponte cómodo. Concéntrate ahora en tus músculos. Toma aire. Tensa todos los músculos de tu cuerpo. Y suéltalos todos a la vez que sueltas todo el aire lentamente. Verás como la ansiedad baja. Ahora nota uno a uno los músculos de tu cuerpo y ves relajándolo uno a uno. Verás como has reducido tu ansiedad a la vez que relajas tu cuerpo.
Atención plena para reducir la ansiedad:
Mientras realizas alguna actividad rutinaria del día a día, intenta tomar conciencia de lo que haces y prestar atención plena a la actividad. Presta atención a tus sensaciones para ello.
¿Necesitas ayuda psicológica?
Soy Nuria Montero, experta en Psicología EMDR ¡Te puedo ayudar!
Meditación:
La meditación puede ser una buena herramienta para reducir la ansiedad. Túmbate o siéntate en un lugar tranquilo de tu casa. Si quieres cierra los ojos. Practica respiraciones profundas. Nota tus sensaciones.
La mente es como el sonido de las moscas en verano, algo vendrá a tu mente. Apártalo mientras te concentras en la respiración de nuevo.
Realiza esta operación cada vez que venga algo a la mente. Concéntrate en la respiración.
Finalmente abre los ojos lentamente y concéntrate en tu entorno. Que ves. Has conseguido reducir tu ansiedad.
Párate a pensar y a contar los objetos que ves en tu habitación y desactiva tu piloto automático.
Muchas veces sentimos ansiedad porque vamos en modo automático por la vida. Igual que cuando conducimos hacia un destino que conocemos mucho y no paramos atención en detalles nuevos del paisaje.
Si te ocurre esto y no puedes controlar tu ansiedad. Para tu mente un segundo y observa a tu alrededor lo que ocurre. Cuentas los objetos rojos que ves. Ahora cuenta los verdes. Ahora los azules. Ves como baja tu ansiedad.
Practica estos pequeños ejercicios para reducir la ansidad todos los días, y aplícalo a tu día a día.
Por último, si experimentas episodios de ansiedad de forma recurrente, como psicóloga profesional, te puedo ayudar. Contáctame y concretaremos una visita para empezar a mejorar.
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